Bendito Anonimato "El factor Matías" Cap. I

Matias perseveraba con los 120 en el aposento alto, se trataba de una reunión intencional y unánime.
Día a día en estos encuentros primaban la oración y el ruego al unísono de corazón. 
El versículo 15 del capitulo 1 del libro de los Hechos relata que "Pedro se levanta en medio de sus hermanos" y este no era un hecho menor, claro esta. Matias observa con detenimiento y un silencioso jubilo como emerge el líder que había dentro de ese hombre que hasta no hace mucho lo llamaban "junco" (Simón)
¿Qué pasaría por su mente cuando esto estaba sucediendo? ¿Habría llegado mi momento? ¿Si lo hizo con Simón, como no lo hará conmigo?
Preguntas supuestas, hipotéticas, de un simple y limitado mortal. Pero, lo que Pedro comienza a declarar no es pasajero, es eterno, ya que fue inspirado por el Espíritu Santo de Dios para todos nosotros. 

Lo primero que dijo es que "era necesario que la escritura se cumpliese" y es por ello que cada uno de nosotros deberíamos leer la biblia, no para llenarnos de vaga información sino para encontrarnos en ella y una vez allí permitir que esas letras dejen de estar impresas en papel, y pasen a estar impresas en nuestro corazón. 
Siempre que estamos en Dios su palabra se cumple en nosotros, y eso nos proporciona descanso, pero no el que se obtiene de un buen dormir, sino el descanso espiritual que puede mantenernos totalmente estables, equilibrados y descansados aun en medio de la peor tormenta o batalla. 

Matias siempre había estado allí, y esta es una gran revelación, todo el tiempo en que el Señor entraba y salía, desde el día en que fue bautizado por Juan el Bautista hasta el día en que subió al cielo, fueron tiempos que Matias había compartido con él. Los milagros, el poder manifiesto del espíritu de Dios que reposaba sobre nuestro Señor y el mensaje del reino de los cielos, no eran portadas de un diario matutino en la vida de Matias, él había sido testigo, él estuvo allí; lo vio entrar, lo vio salir, y vio cumplirse la escritura delante de sus ojos "el guardará tu salida y tu entrada, desde ahora y para siempre"

En estos tiempos de la posmodernidad tenemos un faltante de perseverancia, hay un faltante de unanimidad y es por la falta del enfoque correcto que terminamos poniendo "el carro antes del caballo".
Pero poder ver con atención lo que representa el aposento alto, creo que nos puede devolver a la perspectiva correcta que necesitamos.

El aposento alto representa varias cosas; 

Representa lo que estaba y ya no está, lo nuevo que viene, lo que me conviene recibir, la espera en obediencia, el proceso, la transición, la comunión, la oración, la manifestación del liderazgo, el cumplimiento de la palabra, la continuación del oficio apostólico, el lugar correcto, el momento correcto, representa subir a lo alto para buscar las cosas de arriba (lo que recibo en las alturas en la tierra no esta, esto también tiene que ver con quienes me reúno, con quienes comparto mi vida), la perseverancia, la fidelidad, la investidura de poder, las nuevas lenguas que me son dadas, el poder para testificar, el poder para ir hasta lo ultimo de la tierra.

La pregunta que surge entonces es; cuándo el Señor se manifieste... ¿Dónde quieres estar?